Cadenas
He roto tantas cadenas de mails que no sé cómo sigo viva. Ahora mismo me he ganado otra colección de años de mala suerte en el amor. Por el contrario, si la hubiese enviado a 15 personas en un plazo de 15 minutos, entre la una y las dos de la manaña, alguien a quien quiero me diría que me ama... En fin... Dímelo igual, ¿vale? :P Y entonces me paro a pensar en la última racha de mala suerte... Uy, qué mierda. Coincide con el momento en que me harté de las putas cadenas y decidí sufrirlas yo sola y dejar que mis amigos disfrutasen de un correo libre de porquería, al menos asociada a mi cuenta de correo. La decisión la tomé hace mucho. Así que las amenazas ya no sirven conmigo. Se acabaron las cadenas por siempre jamás. Y así, al menos viviré rodeada de la mala suerte dominante pero con la conciencia bien tranquila de no haber jodido a mis amigos otorgándoles la misma suerte. En fin, si alguien sabe cómo contrarrestar este tipo de maldiciones que me avise... Que sino nadie me va a querer ...