Hoy
Me encantan esos días en los que hace calor fuera y yo me quedo en casa (ante la mirada incrédula de todo el mundo). Esos días, no tengo que sacarme el pijama (pantalón negro aterciopelado y camiseta de tiras blanca) ni tengo por qué calzarme. El suelo no está frío y puedo caminar sintiendo cada paso que doy. Todo el mundo en casa se ha ido a la playa. Así que nadie me obliga a comer como es debido. Desayuno delante del ordenador, a las tres de la tarde, torrijas que mi madre dejó hechas con un vaso de agua para bajarlas. Me había tentado hacer un zumo de naranja, pero... Mmmmm, estoy vaaaaaaagaaaaaaa... xD Anoche fue algo extraño... Bebí más de lo que debería... Y me dediqué a intentar ser un ángel de la guarda... Aunque nunca se puede salvar a todo el mundo, no puedo dejar de intentarlo. Algunos se enfadan por ello... Porque cuando necesitan toda mi atención, yo me divido entre todos aquellos que me tienden la mano en busca de ayuda... Pero tengo que ignorar esos enfados... Tengo que...