Hurgando en la herida
Doy vueltas y más vueltas hasta que irremediablemente mi rumbo me trae a una cama vacía de amor, vacía de caricias, llena tan sólo de recuerdos que no alimentan el calor de mis huesos congelados.
Hurgo en la herida al recordarte, al pensarte, al desearte... Porque faltan ocho días para verte que se me harán eternos...
Cuanto más tiempo paso contigo, más ganas tengo de comenzar una vida a tu lado.
No puedo dejar de extrañarte...
Ni siquiera quiero intentarlo...
Comentarios